Body positive: El movimiento que llegó para quedarse

Estándares, modelos, patrones y esquemas a seguir, que en ocasiones nos fuerzan a salirnos del carril de lo que realmente importa: sentirte bien contigo misma, con tu piel, con tu cuerpo, con lo que ves frente al espejo y sobre todo con tu forma de ser.

Por Jabiela Reguera Chao

Durante años la sociedad ha dictado con mano firme la manera de cómo se debería hacer tal o cual cosa, en este caso, ha sido una gran sometedora de estricta calificación los cuerpos y cánones de belleza que, en la mayoría de los casos, nos hemos visto obligados a seguir. Lucir gorda o extremadamente delgada, hacer ejercicios para mantener una correcta salud y no por vanidad o buena apariencia, entrar en la famosa talla ideal 90-60-90, son factores que, gracias a las nuevas generaciones, han ido cambiando.

El movimiento bodypositive se crea como respuesta a los resultados negativos que se forman al no lograr conseguir el tan “anhelado” estándar de belleza que se impone, unas veces por no tener un cuerpo esculpido y otras porque con más curvas pudieras verte más sana. El único objetivo de esta nueva corriente es impulsar la aceptación, tomar conciencia de la inclusividad de todas las personas, para así lograr un mundo más comprensivo en el que cualquier cuerpo goza de ser hermoso, único y de tener igualdad de derechos.

Alejandra Reguera, dice que “no es tanto inseguridad como vanidad, quisiera hacerme algún que otro retoque, pero nada que tenga que ver con baja autoestima. Amo mi cuerpo exuberante, digno de una mujer latina”. A pesar de que hace ejercicios para mantener su peso en orden, no niega que de igual forma le gusta verse fitness.

Yisell Mendez Serrallonga, socióloga explica que sobre los “cánones de belleza “ es necesario aclarar que debe ser entendido como un fenómeno histórico-sociocultural a lo largo de la historia de la humanidad. Tal afirmación permite destacar que las variaciones que han tenido lugar en el tiempo, se deben a una adecuación a su contexto. Muchos de estos estándares de belleza han funcionado de manera cíclica, como es el ejemplo de la percepción de belleza que tenían los griegos, donde existía una predilección social por los cuerpos atléticos, esbeltos y asimétricos. Tales parámetros remontan en el periodo del Renacimiento e incluso en la actualidad con algunas diferencias. Hoy en día es difícil hablar de “ las tendencias estéticas “ sin pensar en ellas como un negocio global rentable que genera miles de millones de dólares tanto en la industria textil, cosmética, de cirugías estéticas, publicidad entre muchas otras. 

La sociedad, entendida de forma muy sintetizada, como sistema complejo de relaciones entre individuos, siempre ha elaborado un articulado de normas, estereotipos, códigos morales y categorizaciones para facilitar el entendimiento común de la realidad y el funcionamiento en sociedad. La belleza, no ha estado exenta de estas cuestiones.

En resumidas cuentas, es muy difícil que  dejen de existir los cánones de belleza por cuestiones culturales, mediáticas , económicas y sociales, sin embargo, podemos contribuir cada día a fomentar el autoestima, el bienestar personal y la aceptación a la diversidad y por qué no , el reconocimiento de la imperfección como natural y el respeto a todo aquel que decida  cambiar su realidad por su propio esfuerzo o a aquel que se sienta bien con la que tiene . Este análisis deviene en un problema antagónico, donde lo que se supone que nace de un bien  social por categorizarnos y comprendernos, ha derivado a lo largo de la historia en problemas serios contra nuestra autopercepción, autoestima y salud . El body positive propone la aceptación personal y la de los cuerpos tal y como son, pero no podemos obviar valores muy importantes  como lo son la superación personal , la búsqueda de un buen estado de salud, y el reconocimiento de nuestras potencialidades, pero también de nuestras debilidades. 

El temor e inseguridad que consigue crear nuestro físico suele ser una dificultad a la que nos debemos resistir el día a día. Esto principalmente producto del mundo de la moda y del espectáculo, donde se ha promocionado un tipo de perfección, de la mano de fomentar cuerpos delgados y lo más lejos de la imperfección para entender de esta forma que una persona está saludable. Sin embargo, esta apreciación está absolutamente deformada de lo real y auténtico y ha llevado a formar aspiraciones arrolladoras para llegar a cuerpos perfectos, produciendo muchas veces, una gran frustración, trastornos alimenticios o depresión.

Muchas son las marcas que apuestan por la diversidad a través de acciones y campañas con modelos que sepan incorporar cualquier tipo de persona, también en la publicidad como en las pasarelas u otros eventos. Por otra parte, gracias a las posturas y las continuas demostraciones de apoyo de artistas influyentes tales como Selena Gómez, Lady Gaga, Lizzo , Pink,  entre otras, quienes han mantenido la misión de entregar un mensaje  que trate  de proyectarse de manera respetuosa y aceptación para con cualquier persona, obviado su apariencia, su peso o su talla.

“Me gustan mis libritas de más. Me siento bien así. Veo a mujeres de tallas grandes en revistas, videos. De hecho, he participado en campañas publicitarias posando para emprendimientos con contextos diversos”, cuenta Midorys Pérez. Aunque siente que hoy en día se ha avanzado mucho en el sentido común y la aceptación de la diversidad y variedad de los tamaños, aún cree que hay mucho por pulir, mucho que interiorizar, afirma que las personas no se miden por sus tallas sino por los valores y educación, ante el mundo. “Aceptarme tal y como soy, con mi figura mis curvas, mis kilos de más, me siento bien, creo que he tenido la suerte o dicha, de nunca haber sentido rechazo de las personas que he conocido a lo largo de mi vida, al contrario, siempre me han motivado a ver a las personas como son, con su diversidad de tamaños, colores, etc.”, concluye.

Practicar y desplegar el body positive no solo trae sentimientos de comodidad, fortaleza y felicidad con el sagrado templo, que es nuestro cuerpo, sino además te dará la mejor lección que es amarte y aceptarte tal y como eres. Sintiéndote orgullosa y valiosa de todo aquello que te guste potenciar, luciendo sexy para ti  y brindándote la oportunidad de sentirte hermosa en cada instante, porque ya lo eres.