A 15 años del estreno de María Antonieta, la película ícono de los millennials
Un 24 de mayo, fue estrenado en Francia este film de Sofía Coppola, que fue duramente criticado, pero amado por el público. Una historia del siglo XVIII escrita con influencias modernas que lograron hacer de esta odiada película, un clásico.
No eres la única que vio María Antonieta: Una reina adolescente y soñó con vestidos rosados, botellas de champaña y cajas de macarons. Bueno, ese era uno de los objetivos de Sofía Coppola, directora, productora y guionista de esta película que retrata a Marie Antoinette, interpretada por Kirsten Dunst, como una adolescente incomprendida que le gusta salir de fiesta, mientras intenta complacer a su madre, y no como se habla de ella en los libros de historia: una reina egoísta y traidora. Al parecer esto le molestó en desmedida a los críticos, ya que el 24 de mayo de 2006, cuando fue presentada por primera vez en el festival de cine de Cannes en Francia, al finalizar se escucharon un par de aplausos, antes de que comenzaran los abucheos. La lluvia de críticas, como no es sorpresa, venía en su mayoría de hombres, diciendo que no coincidía con las fechas históricas, que carecía de “valor real” e incluso una llamativa comparación que dice que la trama parece como “Paris Hilton si se casara con un príncipe francés impotente en lugar de salir con imbéciles armados con videocámaras”.
No es secreto que las academias de premios y críticos de cine son liderados por hombres blancos. En un estudio de la Universidad del Sur de California, se determinó que cerca del 77% de los reseñantes son hombres y el 88% son blancos, es decir, cero diversidad. Es entendible el peso histórico de la reina María Antonieta, pero la película nunca fue escrita como una biografía exacta. La directora, que tenía menos de 35 años cuando estrenó su film, luego del abucheo que recibió, habló con The New York Times diciendo: “Quería hacer una historia personal y no una gran película biográfica histórica épica. Me aburría cuando se volvía demasiado detallado. No quería estancarme con la historia, sino concentrarme en las relaciones personales entre estas personas. Louis no se acostaba con ella, así que quería ir salir y divertirse, como si alguien en un mal matrimonio fuera de compras”.
Desde un principio, Sofía Coppola quiso la influencia femenina en la producción, en vez de leer la estructurada biografía “Marie Antoinette: El Retrato de una Mujer Promedio” por Stefan Zweig, prefirió basarse en la obra de Antonia Fraser, que retrata a una niña de solo 14 años puesta al poder de todo un país, y que su inmadurez la llevó a fracasar como reina.
Como siempre fue planeado, la trama de esta película quería más que la típica historia. Por esto, se hace un choque entre el siglo XVIII y el XXI, dándole una sensación más cercana a la adolescencia actual. Por ejemplo, con la banda sonora, The Strokes, New Order, Air, Aphex Twin o The Cure son algunos de los que conducen este relato de una forma muy armoniosa, acompañada también por títulos ochenteros de Siouxsie and the Banshees o de Phoenix, un grupo francés de rock alternativo formado a finales de los años 90 en Versalles, Francia. Este choque cultural no solo se ve a través de la música, sino también en el vestuario.
Gran parte de la producción fueron los atuendos y accesorios elegidos especialmente para darle vida a esta diva adolescente. De partida, en 2007 ganó el Óscar a Mejor Vestuario gracias a la cuatro veces galardonada, Milena Canonero, creadora de los voluminosos vestidos color pastel, que le daban inocencia a la extravagancia de la joven reina, los que iban perfectamente combinados con los diseños exclusivos de calzado hechos por el diseñador español Manolo Blahnik, quien creó todos los zapatos usados en la película, excepto por las famosas Converse lilas que hacen un cameo en una de las escenas, que como explica Coppola, representan la edad de María Antonieta.
Otra curiosidad, es el personaje de Hans Axel de Fersen, el conde sueco interpretado por el actor Jamie Dornan, fue pensado por la directora para asemejarse al estilo del cantante ochentero de pop, Adam Ant.
Algo que si se quería mantener genuino, fue la locación. En una excepción, el gobierno francés autorizó que la filmación se llevara a cabo en el Palacio de Versalles, esto por 12 semanas de la primavera de 2005. Así que todas las habitaciones y salones que ves en la película son auténticos. Incluso se tenía a disposición las piezas de la realeza para dejar el equipaje de la producción y el elenco, y se trajo especialmente un arpa antigua, que fue construida en París en 1783, del “Museo dell’Arpa Victor Salvi” y se usó en el baile de la boda de María con Louis.
Se dice que este film creó el “Rosado Millennial”, que disparó las ventas de macarons y generó una tendencia de fiestas temáticas al puro estilo Versalles. Y hasta hoy sigue influenciando, incluso a la protagonista, Kirsten Dunst quien anunció su embarazo con una sesión de fotos similar a la que hizo para Marie Antoinette.
Esta película no es la biografía de María Antonieta de Austria, sino que una película sobre ser adolescente. Están los populares, los nerds y la chica incomprendida y rebelde que va de compras con sus amigas cuando está triste o de fiesta cuando está aburrida. No solo se da en un contexto de celebridades perseguidas por la gente como Lindsay Lohan, Paris Hilton o Britney Spears, sino también con otras películas adolescentes icónicas como La Nueva Cenicienta o Chicas Pesadas. Toda la producción llevó años y se puede ver en cada detalle, a pesar de todas las críticas, esta obra es un ícono de los 00´s.
