A 35 años de su muerte, conmemoramos a Simone de Beauvoir
La revolucionaria novelista y filósofa existencialista falleció en París un 14 de abril. Es por esto que hoy queremos recordar la trayectoria, lucha, pensamiento y legado de la mujer libre que cambió la historia del feminismo para siempre.
Intelectual, existencialista, escritora, profesora, revolucionaria, persistente, feminista. Cuesta pensar en la historia de las mujeres sin Simone de Beauvoir. Han pasado 30 años de su muerte y 72 desde que publicó su obra maestra, Deuxième sexe: “Este mundo ha pertenecido siempre a los hombres”, es la primera línea del libro publicado en 1949. Tras todos estos años, El segundo sexo se mantiene como uno de los lineamientos fundamentales de la filosofía feminista, dejando una vez más en evidencia la revolución en el pensamiento que instaló de Beauvoir. En su aniversario de muerte, repasamos la trayectoria de una mujer que dedicó toda su vida a la emancipación y reivindicación del género femenino.
Convicciones desde la juventud
Fue un 9 de enero de 1908 cuando nace Simone Ernestine Lucie Marie Bertrand de Beauvoir, en medio de una familia burguesa cristiana. Su padre se empeñó en que tanto ella como Hélene, su hermana, recibieran una educación privada, de élite y estrictamente católica. Desde pequeña, de Beauvoir ya rechazaba dichas doctrinas religiosas, declarándose atea a sus 15 años. Esa crisis y cuestionamiento sobre la fe pudo haber sembrado el gran pensamiento existencialista de la autora, quien creía que la religión era una manera de dominar al ser humano.
Lejos de que la ausencia de Dios autorice toda licencia, al contrario, el que el hombre esté abandonado sobre la tierra es la razón de que sus actos sean compromisos.
Simone de Beauvoir
La actitud de verbalizar y actuar según sus convicciones y visiones de mundo continuó siendo una constante en la vida de Beauvoir, ya que termina emancipándose de sus padres y decide ser escritora. La gran determinación por sus ideales y pensamiento liberal la hicieron seguir su propio camino, alejándose de sus padres y círculo de amigos de ese entonces. Además Simone quedó libre de la presión de buscar un marido, puesto que la guerra afectó fuertemente las finanzas de su padre, dejándola sin dote. De esta manera, entra a estudiar Letras y Filosofía en la Sorbona. En 1929 se convierte en una destacada licenciada, pasando a ser la novena mujer en graduarse en esa universidad.
Una pareja atípica en la época
Ese mismo año, a los 21, la filósofa conoce a un joven Jean Paul Sarte, quien sería su eterno compañero. La relación con el existencialista, que duró hasta la muerte de éste en 1980, escapaba de los cánones de la época: un amor no exclusivo, sin casarse ni convivir juntos, lejos de las estructuras clásicas de una relación de pareja. Revisaban mutuamente los escritos del otro, muchos de ellos, ensayos que versaban sobre la libertad.
En 1931, en medio de la guerra, la escritora llega a Marsella para ejercer como profesora. Sartre se quedó en Le Havre, de manera que se mantuvieron separados por ese tiempo. La opción para que esto no ocurriera era casarse, pero la filósofa se negó.
En 1943, de Beauvoir publica La invitada, obra que mezcla la auto ficción —su relación amorosa con Sartre y una tercera persona— además de reflexiones sobre temáticas como el amor, el otro y la existencia misma.
El día que una mujer pueda no amar con su debilidad sino con su fuerza, no escapar de sí misma sino encontrarse, no humillarse sino afirmarse, ese día el amor será para ella, como para el hombre, fuente de vida y no un peligro mortal.
Simone de Beauvoir
La lucha por sus ideales a través de la escritura
El éxito de la escritora no llegó con facilidad. Esto, por supuesto no por falta de talento, sino que por la mentalidad conservadora y cerrada de la época. Muchos criticaban los escritos de la novelista y los tachaban como escandalosos. Por ejemplo una vez, en 1940, una madre la acusó de implantar ideas a su hija, además de denunciarla por haber tenido supuestamente una relación con la misma. De esa forma, en 1943, de Beauvoir deja la docencia para entregarse por completo a la escritura. Así es como, con el paso del tiempo, termina convirtiéndose en una de las máximas representantes del existencialismo.
Más tarde regresa a la Sorbona a ejercer la docencia y además participó activamente en una radio libre francesa, Radio Vichy. Asimismo, además de realizar sus propias novelas y ensayos, fundó en 1945, junto a Sartre, una revista llamada “Les temps modernes” (Los tiempos modernos) . En ella se generaba gran espacio para el debate político e ideas de la posguerra a través de ensayos y otros escritos, donde ambos autores junto con otros destacados de la época expresaban su pensamiento. De Beauvoir siempre tuvo sus opiniones políticas firmes: de izquierda y existencialista. Por ejemplo, solía realizar viajes junto a Sartre por Cuba, Rusia, China y Vietnam en defensa del comunismo.
El hecho de que exista una minoría privilegiada no compensa ni excusa la situación de discriminación en la que vive el resto de sus compañeros.
Simone de Beauvoir
Derechos de las mujeres y su legado en el feminismo
Simone de Beauvoir era una férrea defensora de los derechos humanos y, en particular, de los derechos de las mujeres. En 1949, el mundo conoce otra obra de la escritora, posiblemente una de las más relevantes para el feminismo moderno: El segundo sexo. “Mujer no se nace, se llega a serlo” es una de las muchas líneas de su ensayo que se quedaron escritos en la historia para siempre. En este escrito la autora instala y reflexiona sobre las construcciones sociales sobre cómo la mujer ha sido relegada a un segundo plano, a una segunda clase, a roles de segunda categoría. Cuestiona y problematiza respecto de concepciones patriarcales arraigadas que han históricamente oprimido a las mujeres, sobre cómo se le considera como un mero acompañante, se mantiene en lo doméstico y reproductivo, jamás como un sujeto político-social relevante.
El hombre se define como ser humano y la mujer como femenina. Cuando ella se comporta como un ser humano, se dice que está imitando al varón.
Simone de Beauvoir
Esta obra marcó un antes y un después: En su tiempo, fue tan controversial que se categorizó hasta de pornográfica. Hoy, es una de las piedras angulares en materia de género, que sentó las bases teóricas en materia de igualdad. Esta obra fue la que consagró a la pensadora como una de las precursoras del feminismo.
“El feminismo es una forma de vivir individualmente y de luchar colectivamente”.
Simone de Beauvoir
Aniversario de su muerte
Simone de Beauvoir nunca dejó de escribir. Por ejemplo, ya en 1970 publicó La vejez, texto en el que reflexiona sobre la realidad y marginalidad que viven las personas mayores en la sociedad. Una década después, en 1980, muere Jean-Paul Sartre. La autora dejó constancia de los últimos momentos junto a él en su ensayo La ceremonia del adiós. Un año después, de Beauvoir publicó La ceremonia del adiós. A raíz de una pulmonía, la filósofa muere un 14 de abril de 1986. Actualmente, descansa en el cementerio de Montparnasse, enterrada al lado de su compañero de vida.
No hay muerte natural: nada de lo que sucede al hombre es natural puesto que su sola presencia pone en cuestión al mundo. La muerte es un accidente, y aun si los hombres la conocen y la aceptan, es una violencia indebida.
Simone de Beauvoir
Novelas y ensayos destacados
- La invitada (1943).
- La sangre de los otros (1945).
- Todos los hombres son mortales (1946).
- Los mandarines (1954).
- Las bellas imágenes (1966).
- La mujer rota (1967).
- Cuando predomina lo espiritual (1979).
- Para una moral de la ambigüedad (1947).
- El existencialismo y la sabiduría de los pueblos (1948).
- El segundo sexo (1949).
- El pensamiento político de la derecha (1955).
- La vejez (1970).
