Derribando mitos nutricionales
Las dietas y consejos para perder peso no son algo nuevo pero muchas veces no se ajustan a la realidad e incluso resultan riesgosos para la salud. Esto pasa cuando son recomendados por personas que no son expertas médicas en el área. Es por esta razón que hablamos con la nutrióloga Leisly Vidal, para aclarar todos los mitos que existen sobre este tema.
Por Gabriela Palominos C.
Ilustración: Consuelo Astorga T.
En internet puedes encontrar un sinfín de dietas “milagrosas” y miles de artículos centrados en las calorías, la información nutricional, los beneficios (y también las desventajas) de alimentos y preparaciones. Así como también una extensa lista de supuestas expertas y supuestos expertos en nutrición. La Dra. Leisly Vidal Díaz, diabetóloga con Magíster en Nutrición Clínica, es enfática en señalar que “muchas personas hablan de nutrición sin haber estudiado o haberse formado certificadamente, en ocasiones entregando mensajes erróneos a los pacientes, quienes piensan que están haciendo las cosas bien, cuando realmente sólo obedecen a falsos mitos sobre esta área”.
A continuación te dejamos 15 mitos populares que son leídos constantemente en sitios y blogs, difundidos de boca en boca, o incluso divulgados en programas de televisión, pero que la Dra. Vidal desmiente explicándote las razones de por qué son falsos y todo lo que no sabías con respecto a éstos.
1. Come menos para bajar más rápido de peso
Falso: Debemos hacer un mínimo de 4 comidas principales como tal y si necesitamos algo entre horas, como snacks, lo debemos incorporar para estar más satisfechas y mantener nuestro metabolismo activo.
2. Los alimentos light son de consumo ilimitado
Falso: No son necesarios para todos, sólo para quienes tiene una obesidad importante. No deben consumirse libremente y aunque el aporte calórico es menor, sí existe.
3. El agua con limón después de las comidas “disuelve” las grasas
Falso: A pesar de ser un cítrico, el limón no tiene la capacidad de ‘diluir’ la grasa almacenada en el organismo. La única forma de reducirla, es con una alimentación equilibrada – es decir, que las calorías que ingerimos sean menores a las calorías que gastamos en el día, el llamado “déficit calórico” –, una buena hidratación y actividad física.
4. EL azúcar rubia /morena es más sana que el azúcar blanca
Falso: Ambas aportan 4 kcal por gramo. Estas calorías se denominan «calorías vacías» porque no tienen valor desde el punto de vista nutricional. La presencia de vitaminas y minerales que aporta la melaza del azúcar rubia es “la ventaja”, pero esto no es relevante nutricionalmente ya que para lograr obtener esas vitaminas y minerales debemos consumir muchísima cantidad de azúcar rubia.
5. El café provoca celulitis
Falso: La celulitis es producto de la genética, sumado a un excesivo consumo de grasas saturadas, grasas trans, azúcares refinados, sedentarismo y mala hidratación. El café no tiene propiedades que generen la famosa “piel de naranja”, menos en su forma más pura y sin azúcares añadidos.
6. Las vitaminas engordan
Falso: Los suplementos, de vitaminas o minerales, no aportan calorías, por lo tanto no tienen relación con el aumento de peso; además si llevamos una alimentación balanceada no necesitaremos consumir suplementos extras por algún déficit vitamínico.
7. Las personas con diabetes no deben consumir carbohidratos
Falso: Los carbohidratos como arroz, papa en cualquier forma, fideos, pan, quínoa, cuscús, etc. son esenciales en la alimentación del paciente diabético. Este grupo de alimentos debe ser consumido tanto para tener una buena salud nutricional, como para mantener las glicemias estables, la clave está en consumir la porción adecuada en cada comida.
8. No hay que cenar después de las 20.00 hrs.
Falso: Hay que cenar todos los días, de lo contrario los pacientes sienten hambre y reemplazan la cena por otra once, una “once – cena” u otros alimentos que, además de ser hipercalóricos y no nutritivos, no cubren las necesidades nutricionales del día. Es preferible cenar algo liviano, aunque sea tarde y así evitar el hambre y picoteos nocturnos.
9. Ser vegano significa comer sano
Falso: La alimentación vegana no incluye ningún producto proveniente del reino animal, tanto en lo que se consume, como de lo que se viste y calza. Sin embargo, si eres vegano, pero consumes repostería o comida chatarra hecha sin productos animales, o bien, alimentos ultra procesados, no te estás alimentando sanamente.
10. Las frutas son sanas y no engordan
Falso: Hay que racionarlas en 1 o 2 porciones por día. Su consumo excesivo generará exceso de fructosa, la cual debe metabolizarse quemando energía diariamente para que al final del día no la almacenemos como grasa.
11. Los alimentos integrales engordan menos
Falso: Un alimento puede tener incluso más calorías que un alimento que contenga harina refinada, pero su consumo se recomienda ya que se metaboliza diferente debido al aporte de fibra y micronutrientes, pero no por ser menos calórico.
12. Los endulzantes son sanos y no tienen calorías
Falso: Existen endulzantes con y sin calorías, así como otros naturales y artificiales, lo importante es saber para qué queremos utilizarlos. Por ejemplo, no todos son recomendados para pacientes diabéticos, otros sirven para cocinar y otros para perder peso. Dentro de mis recomendaciones están el eritritol, la alulosa 100% y estevia 100%.
13. Las grasas son malas y hacen subir de peso
Falso: Las grasas son fundamentales para el organismo, indispensables en el funcionamiento hormonal, además reparan y mantienen las estructuras de membranas celulares, especialmente en el cerebro, ojos y nervios. Son saludables y no tienen relación directa con el exceso de peso siempre que provengan, por ejemplo, del pescado o el aceite de oliva; a diferencia de las grasas cuyo origen es la comida rápida, la bollería industrial o los alimentos ultra procesados, los cuales sí aumentarían el riesgo de enfermedades cardiovasculares y sí tienen relación con la acumulación de grasa corporal.
14. La dieta vegetariana es la mejor para bajar de peso
Falso: Una dieta vegetariana elimina lo que proviene del reino animal, lo que no significa que influya en la cantidad calórica del día, ya que como cualquier tipo de alimentación, lo que hace subir de peso es el exceso de calorías. Y, como este tipo de alimentación es rica en hidratos de carbono y grasas, mal planificada no es amiga de la “delgadez”.
15. El pan engorda
Falso: Es un alimento rico en carbohidratos, necesarios para nuestra alimentación diaria y solo afectará en el peso si la cantidad ingerida sobrepasa las necesidades diarias. Si comes pan en su versión integral, en la cantidad adecuada y con acompañamientos saludables, puedes consumirlo todos los días.